Lo cierto es que no vi El Resplandor en 1980, año de su estreno. Primero, porque era chico, y si bien la producción fue calificada en Chile para mayores de 14 años, y yo justo los tenía, entró a tallar un segundo motivo: era miedoso. ¿Para qué ir al cine a sufrir?, es una consigna que mantengo hasta hoy. No me gustan las películas de terror.

También es cierto que hay veces en que no queda otra alternativa que plegarse a la opinión mayoritaria. “Si tus amigos se tiran del segundo piso, ¿tú también lo vas a hacer?”, era una de las frases típicas de mi madre, que yo solía responder con un “no, no”.

“Sí, sí”, respondí a mis amigos cuando -creo que el año 1984 u 85- sentenciaron “vamos a ver El Resplandor”. Fuimos, vimos y vencimos. Me gustó la película y no me dio tanto miedo. Buena.

Con los años, ya viejón, cuando el filme de Stanley Kubrick ya era considerado una película de culto, supe que a quien no le había gustado The Shining, era nada menos que al autor de la novela en que se había basado: Stephen King.

Desde antes del rodaje, el novelista no había estado de acuerdo en que Jack Nicholson fuera el protagonista (el escritor Jack Torrance), porque estimaba que el actor, quien venía de triunfar en Atrapado sin Salida, tenía cara de loco, desde el principio y permanentemente, y consideraba fundamental que, como en su libro, hubiera un tránsito desde un sujeto centrado y cariñoso al orate en que se convertiría, poco a poco, en el aislamiento invernal del gigantesco y tétrico Hotel Overlook, en las montañas de Colorado.

Tampoco le gustó a S. King la adaptación del personaje femenino que hizo S. Kubrick. Wendy, en su novela, era una mujer de carácter fuerte, mientras que, en la película, interpretada por Shelley Duvall, era sumisa, histérica, gritona.

King también se sintió defraudado por la forma en que Kubrick adaptó lo sobrenatural del escenario (en su libro, el hotel es un villano) y, para rematarla, tampoco le fue grato el final del filme: “El libro acaba en fuego y la película, en hielo”.

O sea, no le gustó nada.

“El problema es que hizo un filme de terror sin entender el género”, dijo el escritor SK del director SK. Aunque son muchos quienes creen que, en este caso, es mejor la película que el libro.